TERAPIA PARA EL DESAHOGO DE PROPIOS Y EXTRAÑOS - AÑO 2

lunes, enero 23, 2006

Rompe tus cadenas

Su me pasa una cadena sobre costumbres extrañas. Por correo electrónico me llegan muchas. Tengo una cuenta especial para amigos especiales y sus mensajes especiales. Entre excesos de feromonas y de filosofía de andar por casa, aparecen cíclicamente cadenas de diferentes colores o sabores.

Nunca sigo una cadena. Esa es una de las enseñanzas de mi abuela. "Guarda la peseta", decía al abrir uno de los mil sobres sin remite que a menudo aparecían en el buzón anunciando milagrosas dichas y terribles penas. A veces guardaba los sobres para despues usarlos en algún "mandao". Mi madre, en cambio, cuando detectaba la moneda en el interior del sobre en blanco, lo cogía entre dos dedos, miraba para todos lados y lo echaba en otro buzón, así, como espantando la mala suerte con actitud de delincuente.

Esta cadena bloguera, como tantas otras, van encaminadas a desnudar un poco más a los blogueros. Costumbres extrañas, dice. !A Su se lo voy a contar! Para que luego vaya diciendo por ahí que me gusta comer lacasitos separados por colores. ¡Ni hablar!Además, estas cosas permanecen escritas y luego pueden volverse contra uno mismo. Me hacen sospechar. ¿Por qué le ha de interesar a alguien que mis instintos asesinos florecen ante la vista de un chucho con un jersey de lana, provocando en mi un deseo irrefenable de asustarlo para que ladre? ¿Es pura curiosidad amarilla o existen oscuros negocios tras ella? Sin duda hay cosas que podrían utilizarse en mi contra. Saber que cuando entro en un local a oscuras, pego zapatazos para espantar a las cucarachas, me inhabilitaría como espía, pero no es ese el camino que he escogido. Mis habilidades son menos útiles para el país. No sé dónde podría encajar mi facilidad para escoger melones maduritos golpeándolos con el dedo, tras haber hecho lo mismo con uno de los tendones de mi cuello. Hasta mi mujer ha reconocido el mérito y ya no se esconde cuando tuerzo la cabeza para tensar el tendón. Y qué decir de los fabulosos "mandalas" que dibujo durante las interminables reuniones de empresa, repletos de geometría y tantrismo. De ahí sí sacarían provecho. Por eso me guardo de exponerlos en público. Cualquier día los edito y me hago rico. Y me retiro. Y me dedico a fabricar cadenas interneteras para matar el tiempo. Sí, eso haré.

4 Comments:

Blogger Nexus said...

Wilson, yo también rompo las cadenas. Por lo que explicas en tu post, el fin último de esa cadena de costumbres extrañas no es otro que quizá escribir un ensayo o un filmar un cortometraje al estilo Jean-Pierre Jeunet. En EEUU, durante la década de los 80, proliferaron seudo-escritores, que enviaban un breve cuestionario a cientros de celebridades, y luego con las respuestas escribían un libro.

23/1/06 07:54

 
Blogger Michi said...

Vaya truco ese!! Que cracks!! :O yo tambien me uno al club de RompedoresDeCadenas!! :)

23/1/06 14:30

 
Blogger Su said...

Sí, en España había un libro de ésos llamado "por qué no es usted del opus dei", creo que escrito por eva jardiel poncela.

Si es verdad lo que dice michi, tanto wilson, como winifredo, como tú como el mono habéis roto la cadena... aunque contestando...

29/1/06 18:08

 
Blogger wilson said...

Por deferencia a ti, Su. Saludos

30/1/06 23:40

 

Publicar un comentario

<< Home