TERAPIA PARA EL DESAHOGO DE PROPIOS Y EXTRAÑOS - AÑO 2

miércoles, septiembre 07, 2005

¡Que se ponga Mel!

España es un lugar, sin duda alguna, lleno de gente peculiar. Uno de ellos, héroe particular mío, es un fulano de Iberia que no contento con sacarse la licenciatura en psicología, por supuesto, en horas de trabajo, montó un consultorio en Internet al que atiende, como no, con el ordenador, teléfono, folios y clips de nuestra “compañía de bandera”.
No os creáis, admiro a este golfillo, es un emprendedor, optimiza los recursos (los de Iberia) y además tiene excusa: si los pilotos, que son unas analfabetos funcionales, montan huelgas para defender sus privilegios, Semana Santa sí, Semana Santa también, porqué no va el a psicoanalizar en tiempo real a, digamos, un obispo vasco.
Lamentablemente, pese a la existencia de este campeón, esto se ha terminado, pero Iberia sigue siendo diferente a esta oleada neoliberal de líneas de bajo coste.
Hace años, en la base de Air Europa en Palma de Mallorca un ingeniero de mantenimiento en línea paró una de las aeronaves, había algo incorrecto y se negó a firmar uno de los formatos que impone la normativa aérea. Al poco rato llamo uno de los Hidalgo (dueños del cortijo) bramando al teléfono. Quería que Mel se pusiera y le explicara, si tenía cojones, por qué había parado su avión. Resulta que MEL es la “lista de equipo mínimo”, en su acrónimo inglés, y es el documento que nuestro aguerrido ingeniero se negó a firmar. Esto, debe ser una leyenda dentro de Air Europa además de servir para animar las veladas de los siempre dicharacheros y chistosos ingenieros aeronáuticos. Lo que no da tanta risa es lo que esta situación desvela.
Pero el mercado es cruel para todos. A cambio de beneficios, Air Europa parece un locutorio suramericano, constantemente reclaman ingenieros y constantemente los pierden, ya bien formaditos, que hartos movil-24h, presión y poco dinero, prefieren tener algo de calidad de vida laboral en un sitio como … Iberia.
Pero lo trágico esto es que Air Europa es, dentro del gremio, una de las empresas “serias”. El Ministerio de Defensa la contrata para llevar a nuestros magros ejércitos a Afganistán después de la carnicería del Yakovlev y mueve decenas de miles de jubilados e ingleses orondos todos los años sin, parece, serios problemas de seguridad.
Pavor da cómo funcionan las de bajo coste. El marketing es perfecto: venden “modernidad”, Internet, buena gestión, operaciones desde aeropuertos de segunda (Gerona, Luton, …), un solo modelo de aeronave, bla, bla, bla, … pero no me imagino al ingeniero de mantenimiento parando por problemas técnicos uno de sus aviones repletos de ganado con billetes a 12 €. En La Muñoza, el ingeniero de Iberia ni pestañea.
Creo que esto da una pista sobre los que ha pasado en la aviación comercial..
Un amigo me citaba hace menos de una año, un estudio publicado por la FAA -Autoridad Aeronáutica Americana- (o Boeing, no lo recuerdo bien). Era en su esencia una multiplicación guarnicionada por un montón de verborrea técnica. Decía algo así como que con los actuales procedimientos de mantenimiento la probabilidad de accidente de cada avión era de uno dividido por un número con un montón de ceros. Una cantidad ridícula que deja de serlo cuando se multiplica por el tráfico aéreo a nivel mundial y sobretodo si se hace por la prognosis de crecimiento exponencial prevista para los próximos años. Concluía diciendo que esa multiplicación daba como resultado un accidente a la semana y que debíamos ir acostumbrándonos porque la fiabilidad de los aviones y sus componentes eran difícilmente mejorable.
Parece que es ese el escenario en el que nos encontramos ahora, aunque con matices. De la tanda de accidentes de la última semana, el único en el que no hubo muertos fue el del A340 de Air France en Toronto. Da que pensar que el incidente que más posibilidades tenía acabar siendo una carnicería (pésimo tiempo, más de trescientos pasajeros, una avión enorme, piloto gabacho, …) fuera el único que acabó sin muertos y con el único rescoldo de demandas judiciales cruzadas entre la torre y la compañía aérea (nadie quiere pagar una avión nuevo). Igual tiene que ver con la experiencia del piloto, el perfecto mantenimiento de la aeronave y, por lo tanto, con el precio del billete.
Es ingenuo pensar, que a raíz de esta cadena de accidentes, no se ha orquestado una campaña en contra de las compañías de bajo coste. Han hecho mucho daño a las tradicionales y estas han visto una oportunidad de oro para contraatacar.
Las de bajo coste llevan años aventando que las líneas tradicionales están llenas de vagos como nuestro amigo el psicólogo y que por ello son más competitivas, pero al final sólo queda un hecho: Si mañana quiero volar a Sevilla, en que compañía trabaja el ingeniero con 20 años de experiencia o el piloto con 5000h de reactor, ¿Iberia o Vueling?

8 Comments:

Blogger Magda Díaz Morales said...

¡uf! vaya que me ha dado temor todo todo esto que dices...

7/9/05 18:26

 
Blogger wilson said...

Excelente Demetrio. Sí, rascando, rascando se saca algo bueno de ti. Pero me has jodido los billetes todo a 10, máxime cuando todos sabemos que a Iberia le hace falta un pococ de humildad.

7/9/05 23:22

 
Blogger wilson said...

Y para incidir en lo que has dicho, recomiendo el articulillo que apareció en El Mundo: http://www.elmundo.es/suplementos/cronica/2005/516/1125784804.html
o visitar la página www.aviaciondigital.com

7/9/05 23:39

 
Blogger Nexus said...

Ayer mismo tuve ocasión de hacer un vuelo con Iberia y me pregunté lo mismo. ¿Cómo es posible que el billete nacional en Iberia cueste aproximadamente 70 euros, cuando hace 5 o 6 años costaba para el mismo trayecto 150 euros? Mientras pensaba esto, abrí el nuevo periódico diario de nuestra compañía nacional (se llama Universal) y venía como uno de sus titulares "Los beneficios de Iberia superan los 29 millones de euros el primer semestre de 2005". Es decir, las compañías de bajo coste están arrastrando a reducciones importantes en precios a las compañías de bandera. ¿Hasta dónde llegarán éstas para conservar el mercado? (de momento, lo único visible es la desaparición del catering).
Yo lo tengo claro, no pienso coger un vuelo en compañía de bajo coste. Prefiero no viajar a viajar en esos aviones. Pero, ¿estaremos seguros dentro de unos años en las compañías de bandera?

8/9/05 08:03

 
Blogger Nexus said...

Por cierto, se me olvidaba felicitarte por tu artículo.
Por cierto, a principios de los 90 se abrió en EEUU (donde el avión se cogía como aquí el autobús) el debate de que si el liberalismo a ultranza debía imponerse en la aviación comercial. Curiosamente, la opinión pública estaba de acuerdo (en su mayoría) a asumir un riesgo mayor (lotería negativa borgiana) a cambio de pagar lo mínimo en el billete. Y ahora tenemos lo que tenemos.

8/9/05 11:23

 
Blogger wilson said...

¿Easyjet o ryanair son de fiar? ¿Son comparables a las que se están prohibiendo?
¿Es Air Europa candidata a bajo coste?

9/9/05 00:05

 
Blogger Nexus said...

Wilson, yo lo tengo claro. Sólo pienso volar en compañías de bandera. Espero que de momento, no bajen la calidad en sus revisiones. Como he dicho antes, prefiero planificar mis vacaciones en otro destino a coger uno de esos aviones.

10/9/05 10:21

 
Blogger wilson said...

Pues espero que mi mujer no lea este post. Casi estais convenciendo a mi bolsillo.

12/9/05 02:04

 

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