Paga, que para algo será.
La amable carta que ERC ha enviado a algunos trabajadores de La Generalitat, invitándoles a sumarse al cepillo del partido, se está tomando demasiado a la ligera. Decían los estudiosos del ramo que la alegría de trabajar debe repercutir en el resto de la sociedad. Al igual que Luis Miguel Dominguín salió corriendo a contarle a sus amigos los detalles de una noche apasionada con Ava Gadner, los beneficiarios de las bicocas deberían repartir los beneficios entre todos sus allegados. Es de bien nacidos ser agradecidos.
Me caen bien los catalanes. Son productivos y agradecidos en todos los aspectos. En la carta queda claro los beneficios de las dos posibles actitudes a tomar. Si los aludidos pagan, disfrutarán de todos los servicios que la Generalitat dispone. Si no pagan, los servicios serán los del estado. ¡Nunca pierden! Ya pueden aprender los gobiernos de las otras Comunidades Autónomas, que sólo piden los votos familiares y las risas agradecidas.
3 Comments:
Y yo pregunto: si los otros partidos no necesitan de este impuestillo, ¿por qué será? A ver si resulta que ERC es el partido menos corrupto, o al menos, el menos hipócrita...
28/3/06 11:44
¿Primero pagan y luego consiguen el puesto de confianza, o primero se enchufan y luego pagan? Me gusta esta nueva versión del impuesto revolucionario en el oasis de la nación catalana.
28/3/06 12:15
Tu paga que algo queda jaja
28/3/06 12:19
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